Guía para ayudarte a contestar a la pregunta ¿Cómo saber si tengo anemia sin ir al médico? Tan solo basándonos en sus síntomas… sin embargo, en el caso de que presentes varios, deberías ir cuando antes para que te confeccionara un tratamiento personalizado que te ayudase a acabar con el problema cuanto antes.
Cuando hablamos de anemia nos referimos a que en el organismo se ha producido una disminución de la hemoglobina (los niveles de glóbulos blancos, rojos y plaquetas se sitúan por debajo de lo normal). Antes de nada tenemos que saber que realmente existen diferentes tipos de anemia, sin embargo la ferropénica (se refiere a presentar un nivel de hierro insuficiente en nuestra sangre) es la más habitual.
¿Cómo saber si tengo anemia síntomas?
Palidez
Uno de los síntomas más habituales de la anemia es la ausencia de color en el rostro a la vez que en diferentes partes de nuestro cuerpo. Esto se produce precisamente porque el número de glóbulos rojos ha disminuido en el organismo.
Además, en algunos pacientes también se puede experimentar una drástica disminución del peso corporal (en algunos casos más pronunciada que en otros)
Dolores de cabeza, mareos y vértigos
Otra forma de averiguar cómo saber si tengo anemia síntomas que nos preguntará el médico es si sufrimos episodios de mareos, dolores de cabeza o vértigo. Además, estos síntomas se pueden agravar todavía más haciendo que el paciente pueda llegar a tener desmayos y hasta perdida del conocimiento.
Una vez que se despierte no tendrá ni la más remota idea de lo que ha pasado.
Incremento de enfermedades de carácter cardiovascular
Cómo ya hemos comentado, una de las principales consecuencias de la anemia es la disminución de la cantidad de glóbulos rojos en el organismo. Estos elementos se encargan de transportar la sustancia hemoglobina a cualquier parte de nuestro organismo. Ahora bien, al haber menos cantidad, el corazón tiene que hacer mucho más esfuerzo para que la circulación de la cantidad de oxígeno en la sangre sea eficiente.
Este hecho puede causar soplos, arritmia, aumento del tamaño del órgano corazón y, en casos más graves, hasta problemas de insuficiencia cardiaca.
Estos son los síntomas más graves que pueden llegar a producir la anemia por lo que conviene identificarlos cuanto antes para poder evitar mayores riesgos de cara al futuro.
Síntomas en los niños
En los niños también la falta de hierro en la sangre también puede llegar a provocar algunos problemas a considerar. Uno de los más importantes es la falta de apetito… consecuentemente, esto derivará en una mala alimentación, retraso en el desarrollo y en el crecimiento y, por otra parte, problemas de conducta.
En el caso de que descubramos que nuestros hijos tienen alguno de estos síntomas, puede que no sea nada o puede que si, en cualquier caso deberíamos de ponernos en contacto con el médico para que les haga un análisis de sangre; de esta forma nos quedaremos mucho más tranquilos.
Algunos síntomas mucho más extraños
Hasta aquí hemos visto cómo saber los sintomas de la anemia prestando atención a los más habituales… sin embargo hay otro que, a pesar de no aparecer con frecuencia, si que es conveniente que los conozcamos por lo que pueda llegar a pasar.
-Algunas personas que tienen anemia pueden llegar a experimentar antojos algo extraño. Pueden sentir la necesidad de consumir cosas que no son comestibles… por ejemplo, tierra, almidón, pintura, hielo. Estos extraños antojos son conocidos como malicia o pica.
-Por otra parte, en las personas que tienen anemia también es muy habitual lo que se conoce como “Síndrome de las piernas inquietas”. Lo que provoca este trastorno es que las personas sientan la necesidad impetuosa de mover las piernas en todo momento; esto tiene un efecto muy negativo sobre el sueño ya que normalmente les cuesta dormir.
-Las personas que no consumen el suficiente hierro en su dieta tienen mayor riesgo de sufrir algún tipo de infección y de que estas tarden mucho más tiempo en poder recuperarse.
Ahora ya has averiguado cómo saber si tengo anemia sin ir al médico; así que ahora confirma el diagnóstico acudiendo a uno.